Los equipos de aire acondicionado, guardianes silenciosos del confort en nuestros hogares, requieren una atención especial para garantizar su rendimiento óptimo y prolongar su vida útil. En este artículo, veremos la importancia vital del mantenimiento adecuado en los electrodomésticos en general y particularmente en los diferentes tipos de aires acondicionados.
También podrás ver cinco prácticos consejos para mantener estas máquinas funcionando correctamente cada vez que las enciendas.
La importancia del mantenimiento periódico en los equipos del hogar
Los electrodomésticos más complejos -y caros- como frigoríficos, lavadoras, equipos de aire acondicionado y lavavajillas, también demandan una atención regular para asegurar su funcionamiento eficiente. Sus dispositivos electrónicos, como sensores, termostatos, válvulas, y mecánicos, como compresores, poleas, engranajes y bombas de agua, si bien están diseñados para esos trabajos, también están expuestos al desgaste, envejecimiento de componentes y otros factores que reducen sus prestaciones.
Cuando alguno de ellos empieza a fallar, el electrodoméstico probablemente no deje de funcionar, pero no lo hará correctamente. Por dar solo algunos ejemplos, estos son indicios de que se hace necesaria una revisión general antes de que el problema pase a mayores:
- La nevera no enfría lo suficiente: los alimentos o bebidas apenas se mantienen frescos y el hielo que se forma no es completamente sólido.
- La lavadora tarda mucho más de lo habitual en llenarse de agua o descargarla. Esto hace que los ciclos de lavado completos demoren hasta 3 horas en lugar de una hora u hora y media.
- El aire acondicionado llena el ambiente de un olor desagradable a humedad o moho, a la vez que no enfría como habitualmente, o bien se forma hielo en la unidad interior.
Un mantenimiento regular no solo prolonga la vida útil de estos dispositivos electromecánicos, sino que también contribuye a la eficiencia energética, al reducir el consumo eléctrico, algo que verás reflejado en tus próximas facturas.

Diferentes tipos de aires acondicionados: conoce algunas opciones en el mercado
Yendo particularmente al equipo de aire acondicionado, podemos empezar mencionando los tipos más comunes en los hogares:
- Aire acondicionado de una unidad: También llamados “de ventana”, porque se instalan en un espacio en la pared que da al exterior. Compactos y versátiles, estos sistemas son ideales para espacios más pequeños. Su instalación sencilla y bajo coste inicial son puntos a favor, aunque su capacidad de enfriamiento es limitada.
- Aire acondicionado split: La solución intermedia, con una unidad interior y otra exterior, permite un enfriamiento eficiente en áreas más grandes. Aunque ligeramente más caros, ofrecen mayor flexibilidad y rendimiento, a la vez que resultan más silenciosos por tener la unidad compresora en el exterior.
- Aire Acondicionado Central: Diseñados para climatizar toda la vivienda, los sistemas centrales son poderosos pero la inversión es considerable. Su eficiencia y control por zonas son puntos fuertes, pero su instalación puede ser más compleja, dado que requiere una planificación adecuada de los conductos de aire para minimizar las pérdidas térmicas.
Aparte de estos, existen los equipos de climatización integral, (conocidos como frío/calor) que funcionan como acondicionadores de aire en el verano y como calefacción en invierno. A esos los tratamos en este artículo.
5 Consejos para mantener tu equipo de aire acondicionado fresco y eficiente
Con estos sencillos pasos, realizados periódicamente, se puede garantizar el correcto funcionamiento del aire acondicionado. A los tres primeros puedes hacerlos sencillamente en casa, y particularmente el tercero es de vital importancia.

Para los otros dos deberás recurrir a los especialistas que te garanticen la detección temprana de posibles problemas.
- Filtros impecables: Cambiar o limpiar los filtros regularmente garantiza un flujo de aire óptimo y mejora la eficiencia del sistema. Los filtros sucios son los principales responsables del mal olor y la baja eficiencia térmica.
- Revisión de las salidas de aire: Asegurarse de que las salidas de aire estén despejadas garantiza una distribución eficiente del enfriamiento en toda la habitación.
- Termostato ajustado adecuadamente: Calibrar el termostato, sea digital o analógico, para una temperatura adecuada en el ambiente reduce el esfuerzo del equipo y promueve un uso más eficiente, lo que redunda en un menor consumo de electricidad.
- Presión de refrigerante: Verificar y mantener los niveles de refrigerante asegura un rendimiento constante y evita problemas relacionados con la pérdida de presión, por ejemplo, no enfriar correctamente.
- Mantenimiento de las bobinas: Limpiar las bobinas del evaporador y del condensador reduce la carga de trabajo del equipo y mejora la transferencia de calor. Las del evaporador (unidad interior) están protegidas por los filtros, pero siempre recogen algún tipo de suciedad ambiente y con la humedad, tienden a formar una capa que les disminuye su capacidad térmica.
A la hora de llamar al servicio técnico
Si el equipo presenta fallas más allá del mantenimiento regular, o bien para llevar a cabo alguna revisión fuera de tu alcance, es esencial elegir un servicio técnico de calidad. Factores como la reputación, la disponibilidad de piezas originales, la garantía del servicio y los costes asociados deben ser considerados cuidadosamente. Obtener múltiples presupuestos y verificar las opiniones de otros clientes pueden ser pasos cruciales al seleccionar el servicio técnico adecuado.
Como habrás podido ver, el cuidado de tus equipos de aire acondicionado va más allá de simplemente disfrutar de un ambiente fresco. Con la atención adecuada y la elección de profesionales fiables, puedes asegurarte de que estos dispositivos funcionen de manera eficiente y ahorrativa, para dar el confort que tu hogar merece.
No dudes en contactarnos para despejar cualquier duda.